Page 131 - LUGARES FANTASTICOS

Pero pasaron los días y el ruiseñor también se entristeció. Su
melodioso canto se transformó en un lamento.
Los emisarios del Emperador lo vieron acurrucado en una rama y le
explicaron para qué lo buscaban.
—Pueden disponer de mí —les dijo el ruiseñor—. Sé que Litay Fo
se sentirá feliz al saber que mi corazón sirvió para ayudar a su padre;
además, hay muchos ruiseñores en el mundo que podrán ser sus
amigos y estoy seguro de que ellos también la recompensarán con
sus trinos.
De regreso en el palacio los emisarios dieron a conocer lo
manifestado por el ave y el Emperador comenzó a llorar, conmovido.
La bondad y el amor demostrados por el pajarillo lo habían
emocionado tanto que no permitió que se le matara. Posado en la
mano del Emperador, el ruiseñor llegó a las habitaciones de Litay Fo
y revoloteó sobre su cama. Desde entonces su amistad se fortaleció,
además de ser inseparables.
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