Page 11 - 5 Emociones

SERES CON UN CORAZÓN INTELIGENTE 1
1
PREVENIR Y CALMARSE
Leonard Berkowitz es un psicólogo
social que investiga las reacciones vio-
lentas de la gente. A los amigos que
exteriorizan su ira los llama “ventilacio-
nistas” y dice que no siempre aciertan:
“Creen que dar rienda suelta a las emo-
ciones es una catarsis y que siempre es
conveniente hacerlo. Pero esos desaho-
gos no garantizan que en un futuro no
nos hierva la sangre de nuevo”.
No es sano reprimir, más sano es pre-
venir la ira, dominarse y exigir respe-
to sin llegar al agravio o el ataque. En
ocasiones, lo mejor es no hacer nada y
ya calmados, discernir si vale la pena
hablar y en qué momento.
Un término de algunos psicólogos para mostrar que, si te agravian, la mejor res-
puesta es permanecer imperturbable como Jesús o como Buda. Sin exaltar el ma-
soquismo ni tolerar graves maltratos, lo que se sugiere está en la sabiduría popular
con dichos quijotescos como: “A un bagazo, poco caso”, y uno más burdo: “A un
cagajón, poca atención”. Eres sabio si no vives del qué dirán y no te amilanas
ante las críticas. Sencillamente las ignoras y sabes que nunca eres más si te alaban
ni menos si te vituperan.
Esto lo practicaba por allá en el año 150 d.C. el sabio emperador Marco Aurelio,
discípulo del estoico Epicteto, suyo es este aforismo: “Tu felicidad no depende de
la realidad, depende de tus respuestas, de tu juicio sobre lo que sucede. Suprime
tu opinión y así suprimes el daño”. Todo un desafío de transformación interior
que pide disciplina y entrega porque la inteligencia emocional no se adquiere en
talleres de dos días. Es un trabajo cotidiano que requiere de estarse puliendo.
Nada es tan conveniente para la felicidad como
sustituir las preocupaciones por las ocupaciones.
Richard Wagner
EMOCIONES 7