Page 143 - FANTASTICOS SUENOS

— Rapunzel, mi amor, te sacaré de aquí muy pronto y seremos felices.
Cada vez que la visitaba, el Príncipe le llevaba ovillos de lana para que
tejiera una trenza fuerte que le permitiera escapar. Todo marchaba bien,
pero un día Rapunzel, que hablaba con la bruja, dijo sin pensar:
—El Príncipe escala más rápido que tú.
— ¡Muchachita traicionera, pagarás muy caro tu engaño! —La bruja,
enfurecida, le cortó la trenza y con su poder mandó a Rapunzel a un
bosque lejano. Allí, la joven tenía la esperanza que el Príncipe llegara.
139