Page 122 - FANTASTICOS SUENOS

—Pinocho, es mejor el estudio, aprender a leer y hacerle caso a tu
padre. —El grillito fue interrumpido por la algarabía y la música que
salían de un teatro de muñecos. Pinocho echó a correr hacia el lugar del
espectáculo sin hacer caso a los consejos de su conciencia. Así comenzó
su larga cadena de mentiras.
Para entrar a ver la función dio a cambio el alfabeto. Una vez adentro,
el empresario llamado Tragalumbre se dio cuenta de que podría hacer
mucho dinero con Pinocho, pero éste, llorando, le contó quién era su
padre y a qué se dedicaba; entonces el hombre, conmovido, le dio cinco
monedas de oro para que se las llevara a Geppetto en su nombre.
Pinocho salió rumbo a su casa, iba jugando con las monedas cuando
una zorra y un gato le salieron al paso.
—¿A dónde vas con ese dinero? —preguntó la zorra, mirando las
monedas.
—Voy a casa a llevarle el dinero a mi papá. Debe estar preocupado
porque es tarde y aún no llego.
—Podrías hacerte rico con esas monedas —continuó diciendo
la zorra—. Conocemos un lugar donde las puedes enterrar para
que se multipliquen.
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