Page 53 - 5 Beneficios de la salud emocional

Franc Podgoršek
primero tal como circula de
manera anónima y repetida,
haciendo solo ajustes de es-
tilo. Luego señalaremos al-
gunas imprecisiones.
La historia, que por cier-
to es básicamente real, dice
que hace algunos años, en
las olimpiadas para personas
con discapacidad en Seattle,
también llamadas “Olimpia-
das Especiales” o “Juegos
Paralímpicos”, nueve parti-
cipantes, todos con alguna
limitación, se alinearon para la salida de
la carrera de los cien metros planos. Cuando
todo estuvo dispuesto, sonó la orden y los atle-
tas partieron a la velocidad que sus condiciones les
permitían.
Pero uno de ellos tropezó a poco de partir y cayó
con estrépito. Entonces comenzó a llorar. Los otros, que
estaban en carrera, oyeron el llanto y se detuvieron. Vol-
vieron sobre sus pasos, conmovidos por lo que le había
pasado al compañero. Todos, los ocho.
Una de las muchachas participantes, que te-
nía síndrome de Down, se arrodilló junto al
caído y le dio un beso diciéndole: “¡Arriba!
¡Ahora, con este beso vas a ganar!”.
Después, los nueve atletas se abrazaron
y así, unidos y en armonía, llegaron cami-
nando a la línea de arribo.
El caso es verídico. Es cierto que sucedió,
pero en Spokane, Washington, en los juegos
de 1976. En verdad, no todos los competi-
dores notaron al caído; algunos continuaron
corriendo, pero los tres que volvieron sobre sus
pasos, incluida la chica del beso, lo auxiliaron y
fueron abrazados con él hasta la línea de meta.
Contener da sus frutos
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