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Análisis de lectura y escritos
Compare los objetivos y tesis del texto anterior con la conclusión, y luego responda el cues-
tionario:
¿CÓMO PODEMOS AYUDAR?
Nosotros podemos hacer algo diferente
Lo primero de lo que tenemos que darnos cuenta es que sí podemos hacer algo diferente
en nuestra sociedad. Podemos cambiar nuestros valores y nuestras leyes para que reflejen
la santidad de toda vida humana. A menudo echamos una ojeada a la cantidad de dinero y
de recursos que gasta el movimiento en pro del aborto.
Los Estados Unidos no están solos en esta degeneración. Otros países como Francia,
por ejemplo, tienen legalizado el aborto, y el gobierno reembolsa los gastos. La comunidad
cristiana simplemente no puede quedarse quieta y permanecer en silencio. En realidad, en
1973, cuando la Corte Suprema dictó sentencia en el caso Roe vs. Wade, e introdujo en
los Estados Unidos el aborto legalizado, los preconizadores del aborto estaban convencidos
de que ya nada podía detenerlos. El aborto fue legalizado, y se dejó quieto el asunto. Sin
embargo, el aborto continúa hoy siendo la cuestión moral más candente de nuestro tiempo.
Recibe cobertura de los medios nacionales de información, y ha favorecido o impedido la
elección de muchos funcionarios del gobierno. Esto ha ocurrido sólo [sic] debido a que un
puñado de individuos interesados se tomaron el tiempo y la energía necesarios para unirse
y oponerse a la decisión que legalizó el aborto. Estos individuos empezaron educando a sus
amigos y familiares. Se dieron tiempo para protestar y hacer manifestaciones frente a las
clínicas de abortos, escribieron cartas a los editores de los periódicos locales, y levantaron
su voz contra las atrocidades del aborto.
Votaron, y trabajaron duro para elegir, tanto para la legislatura estatal como federal, a
candidatos que están a favor de la vida. Fueron individuos los que lograron hacer algo dife-
rente, y que obligaron a que el asunto del aborto saliera a la luz. Hoy día tenemos el aborto
legalizado; pero también se ha recorrido mucho camino en cuanto a nuestra meta de cam-
biar leyes, y todo esto debido a que un pequeño grupo decidió dedicarse a la vida humana.
Allí es donde empezamos hoy día: con usted como individuo.
Aprenda en cuanto al aborto, al infanticidio y a la eutanasia, e instruya también a su
familia, a sus vecinos y a sus amigos. Infórmeles de los hechos en cuanto al desarrollo del
niño antes de nacer. Explíqueles el caso médico y legal del niño por nacer. Usted quedará
asombrado al ver lo poco que la gente sabe de estos asuntos. A menudo las opiniones se
forman basadas en la emoción, o con una cantidad mínima de información. Procure instruirse
usted mismo, e instruya a otros, con los datos completos en cuanto a esas cuestiones vitales.
Trabaje en su comunidad y vecindario para oponerse al aborto, y promover programas
que afirmen la santidad de la vida. Trabaje en las escuelas, de modo que eduque a los jó-
venes, particularmente a los adolescentes, en cuanto a los hechos relacionados al aborto,
al infanticidio y a la eutanasia…
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