Page 68 - 5 Beneficios de la salud emocional
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Capítulo 8
4 Evitar todo tipo de acción
que distraiga
Imagine que es usted quien debe
hablar, supongamos que en una en-
trevista de trabajo o en un examen
académico. Si su examinador golpea
el escritorio con su bolígrafo, aun-
que sea suavemente; si cuelga la mi-
rada lejos, como reflejo de que se le
cruzó otra idea; si se mira la corba-
ta como verificando una mancha…
¿puede imaginar cómo se sentiría
usted? No se engañe. Quien aplica
el examen también escucha y se en-
riquece con el aporte ajeno. Pero,
¿sabrá hacerlo?
5 Tratar de ser em-
pático con el
interlocutor
Ya definimos la empa-
tía como la conjuga-
ción de ánimos y
sentimientos. Ima-
gine que a usted
le están narrando
un hecho triste,
un fracaso afecti-
vo o laboral, y que
usted se muestra
desparramado en su
asiento y con media son-
risa en los labios. La comu-
nicación no durará ni un segundo.
Trate de adaptarse a la situación del
otro, luego decidirá si debe condo-
lerse o animarlo. Pero no llore ante
una anécdota que es risueña para
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el otro, ni se vista de payaso en un
velorio.
6 Ser paciente
No todos tienen el mismo
ritmo para narrar, recordar
un hecho y volverlo pa-
labras o argumentar sus
razones. Si usted consi-
dera que posee un tiem-
po mental más rápido y
que la demora del otro
lo perjudica, no se es-
tará comunicando.
Compartir experien-
cias es también
acordar ritmos y tiempos. Dejar hilar
el discurso es permitir que cada capa
de palabras caiga y deje al descubierto
la morosa pepita del sentido.