Page 48 - 4 Trabajo en equipo
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“Algunos miran al mundo y dicen ¿por qué? Otros dicen ¿por qué no?”. George Bernard Shaw
Capítulo 5
te más tiempo que el de quienes no
poseen dicha característica.
Así, provocar el deseo ganador
supone educar e incrementar nues-
tro optimismo observando las distin-
tas situaciones por las que debemos
atravesar, desde un ángulo favora-
ble. Confiar en las alternativas de
resolución positivas que tenemos
a mano, y en nuestras propias ca-
pacidades y recursos para materia-
lizarlas, nos pondrá en un camino
en el que las metas siempre serán
posibles.
Existe otro elemento sustancial a
tener en cuenta al hablar de las cua-
lidades positivas del carácter: activar
cada una de ellas potencia otras. Ya
hablamos de la perseverancia y la
esperanza, pero la persona ganado-
ra refuerza también su voluntad en
la medida en que es esta última la
que lo ayuda a llevar adelante accio-
nes, acaso fatigosas o poco atracti-
vas; y además fortalece la atención.
Porque frente a una situación difícil,
el ganador, por instinto, debe agu-
zar la observación y estar absoluta-
mente atento a cada detalle, ya que
desde allí partirán las alternativas
que habrán de sacarlo del laberinto.
Pensar con poder
Para pensar y actuar como verda-
deros líderes es fundamental com-
prometerse con una visión del futu-
“Yo voy bien. Todo está bien”
Pangloss enseñaba metafísico-teólogo-
cosmólogo-nigología. Probaba admira-
blemente que no hay efecto sin causa,
y que, en el mejor de los mundos, el
castillo de monseñor el barón era el
más hermoso de los castillos, y que la
señora baronesa era la mejor de las ba-
ronesas posibles.
“Demostrado está —decía Pangloss
—, que no pueden ser las cosas de
otro modo, porque habiéndose hecho
todo con un fin, este no puede menos
que ser el mejor de los fines. Nótese
que las narices se hicieron para llevar
anteojos, por eso nos ponemos anteo-
jos; las piernas, notoriamente para las
calzas, y usamos calzas; las piedras,
para ser talladas y hacer castillos. Por
eso su señoría tiene un hermoso cas-
tillo. El barón principal de la provincia
ha de estar mejor aposentado que
ninguno. Y como los marranos nacie-
ron para que los coman, todo el año
comemos tocino. En consecuencia, los
que afirmaron que todo está bien han
dicho una tontería; debieron decir que
nada puede estar mejor”.
Voltaire
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